Por: Gloria Purizaca
Publicado el 25 de mayo de 2023
“Le estamos haciendo frente al dengue y en 15 días te prometo que vamos a tener que resolver esto”, aseveró la titular del Ministerio de Salud (Minsa), Rosa Gutiérrez Palomino, sobre los casos de dengue en el país el último domingo 21 de mayo. Días antes, también declaró que su sector tenía "controlado el problema".
Sin embargo, las cifras la contradicen. LR Data revisó la sala situacional de dengue del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades Minsa, y encontró que —a la fecha— hay más de 100.000 personas contagiadas y más de 100 fallecidos en todo el país. A pesar de ello, algunas regiones no ejecutan su presupuesto.
Más casos de dengue, menos presupuesto para combatirlo
LR Data revisó el portal de consulta amigable del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) para conocer la ejecución del gasto del presupuesto y encontró que, para tratar las enfermedades metaxénicas —que también comprenden la malaria, bartonelosis, leishmaniosis, enfermedad de Chagas y fiebre amarilla— y de zoonosis —aquellas que se contagian directamente por un animal—, el Ministerio de Salud ha previsto para el 2023 un presupuesto total de S/110.081.683. Asimismo, a ello se suma la aprobación para transferir S/34.010.000 para el financiamiento de las acciones de respuesta a corto plazo.
En los últimos años, si bien el presupuesto designado para prevenir y tratar estas enfermedades ha ido disminuyendo, no es el caso para el 2023, ya que el presupuesto total actual es 30% más que el del año anterior. Desde el 2022, se sabía que las inundaciones y el posible fenómeno de El Niño serían una problemática para los primeros meses del 2022; sin embargo, se designó S/3.224.796 para familias con prácticas saludables para la prevención de enfermedades metaxénicas y zoonóticas. Justamente, la reducción en este aspecto demuestra que esta área no ha sido la prioridad para los gobiernos.
Asimismo, se puede ver que hubo un aumento en el presupuesto modificado con respecto al inicial para los proyectos de enfermedades metaxénicas y zoonóticas. Llama la atención que, igualmente, hasta mayo solo se ejecutó el 10,2% para viviendas protegidas de los principales condicionantes del riesgo en las áreas de alto y muy alto riesgo de estas enfermedades.
Pese a la emergencia en la que se encuentra el país ante el mayor brote de contagios de dengue en los últimos 30 años, según el exministro de salud Óscar Ugarte, las regiones más afectadas casi no han avanzado en el gasto.
Aunque Piura es la región con una de las mayores incidencias de casos y muertes a nivel nacional, solo ha ejecutado un 9% de su presupuesto asignado (S/206.949 de S/2.150.753). Curiosamente, sí se ha desembolsado al 100% el proyecto para familias con prácticas saludables para la prevención de enfermedades metaxénicas y zoonóticas.
Entretanto, no se han realizado gastos para las viviendas protegidas de los principales condicionantes del riesgo en las áreas de alto y muy alto riesgo, y solo un 7,4% para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades metaxénicas hasta mediados de mayo.
Mientras tanto, Ucayali solo ha gastado 5,4% (S/78.983 de S/1.458.294). La región que menos ha hecho uso de su presupuesto es Tumbes con 0,8% (S/12.165 de S/1.516.756), que registra 1.234 personas con dengue.
Pese a que también Ica es una de las regiones que mayor ejecución consigna con 42,6%, es la que más muertes concentra por dengue. Cabe precisar que, igualmente, es de los departamentos que menos presupuesto tiene.
Esta unidad buscó entrevistar a algún vocero o vocera de la Dirección de Enfermedades Metaxénicas y Zoonosis del Ministerio de Salud para conocer las acciones específicas que se están realizando con respecto a esta epidemia, pero no obtuvimos respuesta.
Como apunta un anterior informe sobre el dengue, hay diferentes causas como el cambio climático por las que esta enfermedad metaxénica se agrava cada vez más en el Perú. No obstante, el principal factor es la falta de acceso a agua potable, así como la atención desigual para tratar el virus y la reducción de su presupuesto para el año 2022, como señalan algunos especialistas.
Carlos Alberto Medina Collado, médico infectólogo de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, enfatiza que las epidemias muy pocas veces se pueden prevenir, pero sí se debería mermar el impacto. “Todo esto que está pasando ya se conoce que iba a pasar”, expone. En cuanto a las declaraciones de la ministra en las que asevera que este problema se resolverá la primera semana de junio, Medina sostiene que estos casos van a empezar a bajar, pero no porque se hayan implementado medidas eficaces.
“Así se da de manera regular: se alcanza un pico, una cierta cantidad de contagiados. Es como una ola de COVID-19, que tiene su pico y después cae. En realidad, posiblemente sí esto baje en una semana o dos, pero no necesariamente por lo que se haya hecho o se esté haciendo”, finaliza.
